jueves, 11 de octubre de 2012

El remedio para la mala ortografía


Un buen consejo para pensar estos días de otoño, ya con las primeras lluvias de la temporada. ¿No os parece que es un buen momento para estar en casa y reservar un tiempo para la lectura?

Por placer o para saber más. El caso es que vale la pena.


2 comentarios:

María Pilar Álvarez Novalvos dijo...

Me encanta, Paco.

Cada día constato cómo interesa más a mis alumnos que les cuente los argumentos de las obras que el hecho de leérselas. Y yo intento no desmoralizarme, a pesar de todo.

Un beso, precioso.

Francisco de Pedro dijo...

Gracias de nuevo y como siempre. Contar el argumento no es un mal recurso. La lengua oral también se ha de trabajar. Pero si sólo se quedan aquí, mal asunto.

Besazos